Todo el empeño que pusimos en esta fiesta, los preparativos y la dedicación dieron sus frutos ayer.
Los alumnos llegamos al Estadium Casablanca a las 9.30 para echar un ojo a las instalaciones y así poder tener todo controlado. Ya entonces se empezaba a notar un ápice de nervios porque todo saliera bien. Así; con una mezcla de ilusión, expectación e inquietud; esperamos en la entrada a nuestros ponentes para darles la bienvenida... aunque al final solamente pudo recibirla Camino Ibarz, primera invitada en llegar, más que puntual, con adelanto.
Mientras Santiago Peribáñez (nuestro elegante presentador, con camiseta nueva de rayas) la acompañó a por un café, un número de alumnos cada vez más numeroso se iba acumulando a las puertas del estadium. Las dos puertas del complejo nos traicionaron y, pese a que nosotros esperábamos en la principal, no nos dimos cuenta de que muchos invitados llegaron por la puerta de atrás; así que cuando decidimos volver al la cafetería (lugar de reunión antes de empezar el acto) nos encontramos que Ana Segura también había llegado.
Viriato Monterde es quien se hizo de rogar: apareció con media hora de retraso mientras se celebraba la presentación de la Jornada en la sala de conferencias del Estadium. En este acto intervinieron Lucía Benavente (delegada del curso que nos emocionó con su discurso, un discurso muy cercano y cargado de sentimientos), Pedro Conesa (el subdelegado, que dotó a sus palabras de ritmo y recuerdos y citó, en muy buena hora, a Kapuscinski) y los profesores Daniel H. Cabrera, Rafael Bardají y Paco Hernández Paricio que no dudaron en apostar por esta nueva generación de futuros periodistas.
Tras la inauguración, llegó la pausa-café (aunque esta media hora bien se podría haber llamado pausa-cerveza; y es que fue la bebida más solicitada ya a las 11 y poco de la mañana): ambiente distendido, tiempo que se aprovechó para hablar entre compañeros y comparar las expectativas que cada uno tenía para el día.
Con un cuarto de hora de retraso (o 15 minutos de cortesía) comenzó, en la misma sala, el acto más importante de la mañana. Las conferencias presentadas por Santi tuvieron como protagonistas a nuestros tres invitados: Ana Segura, Camino Ibarz y Viriato Monterde. El tema no era otro que conocer su experiencia profesional, que nos contaran qué es ser periodista. Todos fueron intercalando consejos en su discurso y coincidieron en que esta es la mejor opción que podíamos haber escogido (aunque Camnio no comenzó su discurso así precisamente...), alabaron nuestra ilusión y nos animaron a continuar así. También fue algo en lo que todos estuvieron de acuerdo el hecho de que es muy bueno comenzar, como ellos hicieron, en medios locales que, como dijo Camino, "son la Gran Escuela"; ya que por mucho que Madrid o Barcelona nos llamen la atención, lo que se aprende en sitios pequeños es más y, probablemente, de mejor calidad.
Luego fue el turno de las preguntas por parte de los alumnos, aunque esta vez sin la presencia de Ana Segura que se fue unos minutos antes por cuestiones de trabajo. La primera pregunta tuvo que ver con el periodismo ciudadano, tema al que ya se había referido Viriato durante su ponencia. La opinión de Camino fue clara: "Hay que tener presente al ciudadano, pero también es cierto que en internet hay mucha basura" y Viriato contestó que el periodismo ciudadano es un toque de atención al periodismo tradicional: "los ciudadanos se han adaptado mejor a lo digital que los periódicos". También se les preguntó a cerca de los contenidos del nuevo grado de periodismo y ambos coincidieron en que el son importantes también las asignaturas menos vinculadas con el periodismo como la filosofía o el derecho, ya que ayudan a conformar un pensamiento crítico y, al fin y al cabo, como dijo Camino: "Un periodista va a hablar de todo". Esta pregunta supuso la intervención de Paco Hernández Paricio, coordinador del grado, que comentó la importancia de estas asignaturas y además recalcó que este grado está en fase de prueba, que habrá que ver cómo va saliendo todo. Camino tuvo que enfrentarse a una pregunta que ella misma calificó como "Tener que contestar a quién quieres más, si a papá o a mamá". La pregunta, que vino de la mano del alumno Luis Alcober, fue "¿Puedes decir tres cosas buenas y tres malas sobre la COPE y la SER ya que has trabajado en ambas empresas?" y quedó claro que, para Camino, ambas son buenas y que si tiene algo mejor la SER es que, al ser más grande, dispones de más recursos. Ahora bien, la pregunta por excelencia se volvió a referir al grado: "¿Seríais profesores nuestros? ¿os véis capacitados?". Ambos contestaron con un "Nos enfrentaríamos a las clases y a los alumnos con muchísima humildad; pero también con mucha ilusión".
Cuando Santiago dio por finalizado el turno de preguntas, se clausuró el acto con la entrega de sendas placas a cada uno de los ponentes además de una para el departamento al que pertenece el grado. Acto seguido, todos nos dirijimos a la otra punta del estadium donde, desde hacía unas horas, Daniel Cabrera estaba preparando su asado argentino con la ayuda de varios alumnos.
CONTINUARÁ... (Lu, te he hecho caso.)
